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Cómo cocinar Hígado y cebollas a la antigua
A lo largo de los años, he llegado a disfrutar plenamente de los sabores rústicos y ricos que aporta un plato clásico de hígado con cebolla. Hay algo increíblemente satisfactorio en convertir estos dos humildes ingredientes en una comida de lujo. He cocinado esta receta muchas veces, perfeccionándola a mi gusto, y me emociona compartir mi versión con ustedes hoy. Esta receta es reconfortante, fácil de preparar y siempre sale perfecta si sigues mis pequeños consejos a continuación.
Ingredientes
- 500 gms De hígado de ternera
- 2 Cebollas grandes
- 3 cdas De harina
- 2 cdas De mantequilla
- 1 taza De caldo de carne
- Sal y pimienta para sazonar
- Perejil picado (para adornar)
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Procedimiento
La clave para preparar un buen hígado encebollado es evitar que el hígado se cocine demasiado. Así que, en primer lugar, enjuague el hígado de ternera bajo el chorro de agua fría, séquelo a palmaditas y córtelo en trozos de 1/2 pulgada de grosor.
Sazone generosamente las lonchas de hígado con sal y pimienta. No sea tímido con el condimento, ya que el hígado soporta bien los sabores potentes.
A continuación, reboce las lonchas de hígado sazonadas en harina, asegurándose de sacudir el exceso. Esta ligera capa de harina es imprescindible, ya que proporciona ese exterior dorado y crujiente que contrasta tan bien con el tierno hígado.
A fuego medio-alto, derretir 1 cucharada de mantequilla en una sartén grande. Añada las cebollas y cocínelas hasta que empiecen a caramelizarse; tardarán unos 10 minutos. No olvide remover de vez en cuando para no quemar las cebollas. Una vez caramelizadas, retírelas de la sartén y resérvelas.
En la misma sartén, añadir la mantequilla restante. Cuando esté derretida, añadir las lonchas de hígado en una sola capa. Cocine cada lado durante sólo unos 2 minutos, justo hasta que se doren. Como se mencionó anteriormente, tenga cuidado de no cocinar demasiado o el hígado se pondrá duro.
Cuando las lonchas de hígado estén casi hechas, vierte el caldo de carne en la sartén. Aquí hay un truco: Mientras lo viertes, rasca el fondo de la sartén con la espátula. Este proceso de desglasado une todos los sabores y crea esa deliciosa salsa que une la cebolla y el hígado a la perfección.
Deje que el caldo se reduzca durante un par de minutos y, a continuación, vuelva a añadir las cebollas a la sartén. Dejar cocer todo junto a fuego lento durante unos 2-3 minutos.
Para terminar, rectifique los condimentos si es necesario, espolvoree un poco de perejil picado para darle color y sirva caliente. Este plato combina de maravilla con puré de patatas o arroz esponjoso. ¡Disfrute de su Hígado encebollado casero!