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Dulce de membrillo receta de la abuela
Hoy prepararemos un clásico dulce de membrillo, receta que heredé de mi abuela. Tengo unos recuerdos muy vivos y dulces de preparar este dulce de membrillo junto a ella en nuestra antigua cocina. Ahora, todos en casa esperan con anticipación cuando llega el momento de hacer esta delicia. Algo tan simple como comer una rodaja de dulce de membrillo con un poco de queso fresco puede transportarte a un mundo lleno de recuerdos y sabores auténticos.
Ingredientes
- 2 kg de membrillos
- 1 kg de azucar
- 1 litro de agua
- El jugo de un limón
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Procedimiento
Primero lava bien los membrillos, dado que la pulpa se pega con facilidad a la piel y no queremos desperdiciar nada. Es importante no pelarlos ya que la pectina contenida en la piel ayuda a que el dulce cuaje.
Una vez lavados los membrillos, córtalos en trozos medianos. No necesitas ser preciso con el tamaño, pero intenta que sean más o menos iguales para que se cocinen de manera uniforme. Recuerda quitar las semillas.
En una olla grande añade los trozos de membrillo, el azúcar, agua y el jugo de limón. El jugo de limón es un acelerador natural de la pectina, lo que favorece la textura del dulce.
Cocina a fuego medio hasta que los membrillos estén transparentes. Recuerda remover constantemente para evitar que se pegue al fondo de la olla. Este proceso puede tardar aproximadamente una hora.
Cuando los membrillos estén blandos, retira del fuego y deja enfriar un poco. Luego tritura todo con la batidora hasta obtener una pasta homogénea.
Vuelve a poner la mezcla en la olla y cocine a fuego lento durante otra hora o hasta que el dulce tome color y consistencia. Para saber si está listo, toma un poco con una cuchara y si no gotea, es el punto exacto.
Finalmente, coloca el dulce en moldes y déjalo enfriar hasta que endurezca. La abuela siempre decía que la paciencia es una virtud, así que asegúrate de dejarlo reposar el tiempo suficiente antes de desmoldarlo.