:brightness(2):contrast(2):rgb(2,-2,0):sharpen(0.2,0.2,true)/es/recipe/1YNAvzXKqG4b9RfcHgiy/92491b9981beba497772c160fcd11b.jpeg "Pan frito")
Fuente: Pixabay: stevepb
Pan frito
El pan frito es una de mis recetas favoritas para aprovechar aquellos restos de pan que se van quedando atrás en la bolsa. Es un platillo sencillo pero no por eso menos delicioso. La crocancia del pan corona un centro suave y esponjoso, una experiencia gratificante para el paladar.
Ingredientes
- 4 rodajas de pan duro
- 1 taza de leche
- 2 huevos
- 4 cdas de azucar
- 1 cdta de canela en polvo
- aceite para freír
- 2 cdas de miel (opcional)
Últimos folletos
Valores nutricionales y precio
Procedimiento
En primer lugar, remoja las rodajas de pan en la leche. Este paso es fundamental para obtener un centro suave y esponjoso. La cantidad de leche puede variar dependiendo de qué tan duro esté el pan, pero la idea es que se empape bien.
Mientras el pan se remoja, bate en un plato hondo los huevos.
En otro plato hondo mezcla el azúcar y la canela. Yo prefiero utilizar canela ya que le da un toque muy especial al pan frito, pero puedes sustituirla si lo deseas.
Calienta en una sartén suficiente aceite para freír las rodajas de pan. Es importante que el aceite esté bien caliente, pero no humeante.
Una vez que el pan haya absorbido la leche, pásalo por el huevo batido asegurándote de cubrirlo bien. Luego, rebósalo en la mezcla de azúcar y canela.
Fríe cada rodaja de pan en el aceite caliente hasta que estén doradas por ambos lados.
Sirve el pan frito aún caliente, y si lo prefieres, puedes rociarlo con un poco de miel.
Comparte la receta con otros
Reels
NuevoLas últimas recetas
Las últimas recetas
Reels
NuevoRecetas favoritas
Categorías principales
CooklikeBourdainPan frito
El pan frito es una de mis recetas favoritas para aprovechar aquellos restos de pan que se van quedando atrás en la bolsa. Es un platillo sencillo pero no por eso menos delicioso. La crocancia del pan corona un centro suave y esponjoso, una experiencia gratificante para el paladar.
En primer lugar, remoja las rodajas de pan en la leche. Este paso es fundamental para obtener un centro suave y esponjoso. La cantidad de leche puede variar dependiendo de qué tan duro esté el pan, pero la idea es que se empape bien.
Mientras el pan se remoja, bate en un plato hondo los huevos.
En otro plato hondo mezcla el azúcar y la canela. Yo prefiero utilizar canela ya que le da un toque muy especial al pan frito, pero puedes sustituirla si lo deseas.
Calienta en una sartén suficiente aceite para freír las rodajas de pan. Es importante que el aceite esté bien caliente, pero no humeante.
Una vez que el pan haya absorbido la leche, pásalo por el huevo batido asegurándote de cubrirlo bien. Luego, rebósalo en la mezcla de azúcar y canela.
Fríe cada rodaja de pan en el aceite caliente hasta que estén doradas por ambos lados.
Sirve el pan frito aún caliente, y si lo prefieres, puedes rociarlo con un poco de miel.
¿Cómo has hecho esta receta?