:brightness(2):contrast(2):rgb(2,-2,0):sharpen(0.2,0.2,true)/es/recipe/a_Su7Vgnq08E9rENyXP3/042980f8ce81567fb6a5d77bef15aa.png "Salsa alioli casera hecha en mortero")
Fuente: Canva
Salsa alioli casera hecha en mortero
El alioli es una salsa popular en la región mediterránea de España, concretamente en Cataluña, Valencia y las Islas Baleares. Se utiliza en una variedad de platos y su sabor es tan particular que una vez que lo pruebas, no podrás olvidarlo. Aquí te presentamos una receta fácil para prepararlo en casa.
Ingredientes
- 250 ml aceite de oliva virgen extra
- sal al gusto
- 1 huevo
Últimos folletos
Valores nutricionales y precio
Procedimiento
Pela los dientes de ajo, retira el germen interior y machaca en un mortero con un poco de sal hasta obtener una pasta.
Añade el huevo a la pasta de ajo en el mortero y mezcla bien.
Comienza a añadir el aceite de oliva poco a poco mientras se sigue machacando con el mortero. Es importante que el aceite se agregue lentamente para que se emulsione correctamente con los otros ingredientes.
Continua trabajando la mezcla hasta obtener una textura similar a la de la mayonesa. Si la salsa queda muy espesa, se puede suavizar añadiendo un poco de agua.
Una vez obtenida la consistencia deseada, prueba y añade más sal si se considera necesario. Se puede guardar en una jarra de vidrio y se conservará en la nevera durante unos días.
Comparte la receta con otros
Reels
NuevoLas últimas recetas
Las últimas recetas
Reels
NuevoRecetas favoritas
Categorías principales
Estika02Salsa alioli casera hecha en mortero
El alioli es una salsa popular en la región mediterránea de España, concretamente en Cataluña, Valencia y las Islas Baleares. Se utiliza en una variedad de platos y su sabor es tan particular que una vez que lo pruebas, no podrás olvidarlo. Aquí te presentamos una receta fácil para prepararlo en casa.
Pela los dientes de ajo, retira el germen interior y machaca en un mortero con un poco de sal hasta obtener una pasta.
Añade el huevo a la pasta de ajo en el mortero y mezcla bien.
Comienza a añadir el aceite de oliva poco a poco mientras se sigue machacando con el mortero. Es importante que el aceite se agregue lentamente para que se emulsione correctamente con los otros ingredientes.
Continua trabajando la mezcla hasta obtener una textura similar a la de la mayonesa. Si la salsa queda muy espesa, se puede suavizar añadiendo un poco de agua.
Una vez obtenida la consistencia deseada, prueba y añade más sal si se considera necesario. Se puede guardar en una jarra de vidrio y se conservará en la nevera durante unos días.
¿Cómo has hecho esta receta?