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Fuente: Pixabay: 1192864
Tradicional Garbanzada
La garbanzada es un plato que siempre ha estado presente en mi familia. Recuerdo a mi abuela cocinándola en invierno, y el rico aroma que inundaba la casa era el preludio de un plato contundente y delicioso. A lo largo de los años he ido perfeccionando la receta, adaptándola a los gustos de mi hogar, y hoy quiero compartirla con ustedes.
Ingredientes
- 500 g de garbanzos
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 2 cebollas
- 3 dientes de ajo
- 200 g de chorizo
- 200 g de jamón serrano
- 1 hueso de jamón
- 1 hueso de espinazo de cerdo
- 2 zanahorias
- 2 hojas de laurel
- aceite de oliva
- pimentón dulce
- sal
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Procedimiento
La noche anterior, ponemos a remojo los garbanzos para que se ablanden. Es importante que cambies el agua un par de veces, esto ayudará a reducir los gases que a veces causan los garbanzos.
Al día siguiente, picamos el pimiento rojo, el verde, las cebollas y el ajo. En una olla grande, añadimos un poco de aceite de oliva y sofreímos las verduras hasta que estén doraditas.
Agregamos los garbanzos previamente remojados, el chorizo, el jamón serrano, el hueso de jamón y el espinazo de cerdo. Revuelve bien todo para que se mezclen los sabores.
Añadimos las zanahorias peladas y cortadas en rodajas y las hojas de laurel. Cubrimos con agua, sazonamos con pimentón y sal y dejamos cocinar a fuego lento durante 2 horas. Recuerda remover de vez en cuando para que no se peguen los ingredientes al fondo de la olla.
Una vez los garbanzos estén tiernos, retiramos los huesos y servimos bien caliente. Personalmente me gusta servir este plato con un chorrito de vinagre de Jerez, le da un toque muy especial.
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La garbanzada es un plato que siempre ha estado presente en mi familia. Recuerdo a mi abuela cocinándola en invierno, y el rico aroma que inundaba la casa era el preludio de un plato contundente y delicioso. A lo largo de los años he ido perfeccionando la receta, adaptándola a los gustos de mi hogar, y hoy quiero compartirla con ustedes.
La noche anterior, ponemos a remojo los garbanzos para que se ablanden. Es importante que cambies el agua un par de veces, esto ayudará a reducir los gases que a veces causan los garbanzos.
Al día siguiente, picamos el pimiento rojo, el verde, las cebollas y el ajo. En una olla grande, añadimos un poco de aceite de oliva y sofreímos las verduras hasta que estén doraditas.
Agregamos los garbanzos previamente remojados, el chorizo, el jamón serrano, el hueso de jamón y el espinazo de cerdo. Revuelve bien todo para que se mezclen los sabores.
Añadimos las zanahorias peladas y cortadas en rodajas y las hojas de laurel. Cubrimos con agua, sazonamos con pimentón y sal y dejamos cocinar a fuego lento durante 2 horas. Recuerda remover de vez en cuando para que no se peguen los ingredientes al fondo de la olla.
Una vez los garbanzos estén tiernos, retiramos los huesos y servimos bien caliente. Personalmente me gusta servir este plato con un chorrito de vinagre de Jerez, le da un toque muy especial.
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