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Fuente: Gianluca_Dii from Getty Images
Risotto de calabacín con parmesano
Delicioso risotto de calabacín con parmesano. La receta es sencilla, pero requiere un poco de tiempo y paciencia en la cocción. El resultado, sin embargo, merece la pena.
Ingredientes
- 300 g Arroz arborio
- 1 una pieza calabacín
- 1 una pieza La cebolla
- 2 clavos de olor Ajo
- 1 l caldo de verduras
- 200 ml vino blanco
- 50 g Mantequilla
- 100 g queso parmesano
- Sal, pimienta negra
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Procedimiento
En primer lugar, pica finamente la cebolla y sofríela en una sartén con un poco de aceite de oliva.
Añadir el ajo machacado y sofreír unos minutos más.
Añada el arroz a la sartén y déjelo cocer hasta que se dore, después riéguelo poco a poco con el caldo. Una regla importante para preparar risotto: añade siempre el caldo justo para cubrir el arroz y déjalo hasta que se absorba.
Mientras tanto, rallar el calabacín y el parmesano.
Cuando el arroz esté casi listo, añade el calabacín rallado.
Una vez que el arroz esté completamente cocido (debe quedar un poco al dente), añade la mantequilla y el queso parmesano rallado. En este punto yo no lo cocinaría más, sólo lo removería y lo dejaría reposar en el fuego. Este es mi truco para conseguir un risotto perfecto: el parmesano y la mantequilla sólo deben añadirse al final para conservar su inconfundible sabor y cremosidad.
Por último, sazonar el risotto con sal y pimienta.
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IwaRisotto de calabacín con parmesano
Delicioso risotto de calabacín con parmesano. La receta es sencilla, pero requiere un poco de tiempo y paciencia en la cocción. El resultado, sin embargo, merece la pena.
En primer lugar, pica finamente la cebolla y sofríela en una sartén con un poco de aceite de oliva.
Añadir el ajo machacado y sofreír unos minutos más.
Añada el arroz a la sartén y déjelo cocer hasta que se dore, después riéguelo poco a poco con el caldo. Una regla importante para preparar risotto: añade siempre el caldo justo para cubrir el arroz y déjalo hasta que se absorba.
Mientras tanto, rallar el calabacín y el parmesano.
Cuando el arroz esté casi listo, añade el calabacín rallado.
Una vez que el arroz esté completamente cocido (debe quedar un poco al dente), añade la mantequilla y el queso parmesano rallado. En este punto yo no lo cocinaría más, sólo lo removería y lo dejaría reposar en el fuego. Este es mi truco para conseguir un risotto perfecto: el parmesano y la mantequilla sólo deben añadirse al final para conservar su inconfundible sabor y cremosidad.
Por último, sazonar el risotto con sal y pimienta.
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