Dip cremoso de bacon y queso

Precalentar el horno a 180°C. Mientras se calienta el horno, corta la tapa del pan de molde y vacía el interior, teniendo cuidado de dejar una pared de pan de 1,5 cm. Rompa el interior del pan y la tapa en trozos del tamaño de un bocado y resérvelos para servirlos más tarde junto con la salsa.

En una sartén grande, cocinar el bacon cortado en dados a fuego medio hasta que esté crujiente. Yo creo que una sartén antiadherente reduce la cantidad de aceite necesario y hace que el bacon quede perfectamente crujiente. Una vez que el bacon esté crujiente, retíralo con una espumadera y resérvalo guardando unas 2 cucharadas de la grasa del bacon en la sartén.

En la misma sartén, añadir las cebollas cortadas en dados y el ajo picado, saltear hasta que las cebollas se vuelvan translúcidas. Saltear en grasa de tocino añade una profundidad de sabor que realmente eleva este dip.

Baje el fuego, añada el queso crema, el queso cheddar y la crema agria. Remover constantemente para mezclarlo todo. Espolvorear una pizca de sal, pimienta y hierbas mixtas o condimento italiano sobre la mezcla de queso, remover hasta que esté bien mezclado.

Añada el bacon crujiente a la mezcla de queso y remueva para mezclar bien.

Vierte esta cremosa y deliciosa mezcla en el hueco del pan de molde. Recuerde, no deseche la tapa del pan.

Colocar la mazorca rellena en una bandeja de horno, junto con los trozos de pan rasgados alrededor. Hornear durante 15-20 minutos, o hasta que la salsa esté bien caliente y el pan tostado.

Decorar con cebolleta picada antes de servir. Esto da a la salsa un poco más de color y un sabor fresco que contrarresta muy bien los sabores cremosos y ricos de la salsa.

Disfrute de su dip de mazorca con amigos o familiares, ¡y verá que desaparece antes de lo que piensa! Es el aperitivo perfecto para cualquier evento, desde fiestas navideñas hasta una reunión nocturna.