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Receta casera a la antigua de pepinillos dulces con mostaza
Sweet Mustard Pickle es una agradable adición a mi menú de aperitivos. Preparar pepinillos caseros produce cierta satisfacción. Me encanta controlar los sabores y el equilibrio entre la mostaza ácida y el sirope dulce realmente complementa los pepinos salados y crujientes. A lo largo de los años, he ido ajustando las cantidades de azúcar y vinagre a mi gusto personal.
Ingredientes
- 2 lbs De pepinos para encurtir
- 2 Cebollas
- 1⁄4 taza De sal de mesa
- 2 tazas de azúcar blanco
- 2 tazas De vinagre
- 1⁄4 taza De granos de mostaza (yo prefiero amarillos)
- 1 cucharadita de cúrcuma
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Procedimiento
Empiece lavando y secando los pepinos para encurtir. Es importante utilizar pepinos para encurtir por su firmeza y tamaño. Los pepinos normales quedarán demasiado blandos después del proceso de encurtido.
Corta los pepinos y las cebollas en rodajas del grosor que prefieras. A mí me gustan un poco más gruesos para que queden crujientes. Espolvoréelos con sal y déjelos reposar durante unas 2 horas. Esto ayuda a eliminar el exceso de agua e intensificar el sabor.
A continuación, preparar la salmuera. En un cazo grande, mezcla el azúcar, el vinagre, los granos de mostaza y la cúrcuma y llévalo a ebullición. Puedes ajustar las cantidades para que la salmuera quede a tu gusto; mi preferencia personal se inclina por un sabor más fuerte a mostaza, por lo que suelo añadir un poco más de granos de mostaza.
Enjuague bien las rodajas de pepino y cebolla para eliminar el exceso de sal. Esto es fundamental para que los pepinillos no queden demasiado salados.
Añada las rodajas de pepino y cebolla a la salmuera hirviendo. Asegúrese de que queden totalmente sumergidas. Deje que hiervan a fuego lento durante unos 10 minutos.
Mientras los pepinos y las cebollas se cuecen a fuego lento, esteriliza los tarros para asegurarte de que están libres de bacterias. Esto es fundamental para el almacenamiento a largo plazo.
Por último, con una espumadera, transferir los pepinos y las cebollas a los tarros, dejando unos 2,5 cm de la parte superior. Vierta la salmuera caliente por encima, asegurándose de que los pepinos y las cebollas queden completamente cubiertos.
Cierra los tarros y déjalos enfriar a temperatura ambiente antes de guardarlos en el frigorífico.